Nos encontramos a un Bruce
Wayne muy viejo, casi anciano, pero con un físico formidable, totalmente
alejado de su papel de paladín de la justicia, despilfarrando su tiempo, dinero
y adrenalina en carreras de coches, mientras tanto Gothan City sufre una de las
peores olas de violencia. Unos mutantes hacen de las suyas, sembrando el miedo
como cualquier otro villano pudo hacer en otro tiempo, pero la diferencia es
que ahora Batman no está.
A todo esto, Harvey (Dos
Caras), se somete a una cirugía para recomponerse la imagen, pero lejos de
alegrarse, se enfada más con el resultado y amenaza a los ciudadanos con volar
unos edificios de la ciudad si no le pagan unos cuantos millones. Esta gota
parece rebalsarle a Bruce, y decide acudir a este único llamado, pero una vez
en la salsa, no podrá decir que no a la ardua tarea de limpieza faltante, la
que tanto claman los ciudadanos.
Excelentes gráficos, una
historia bien cuidada, y la miel en los labios por la secuela. Para mi, un
tanto flojos los mutantes estos, pero ya se encargará el Joker de poner
pimienta.
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puntos: 5 Micks
- Director
- Jay Oliva
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